Deléitate con la Tradición: Aprende a Hacer Buñuelos Bolivianos en Casa

En Bolivia, los buñuelos son frituras dulces que perfuman la casa con anís y se bañan con miel de chancaca brillante. Aparecen en ferias, desayunos y veladas de Todos Santos y Navidad. La masa queda esponjosa y bordes crujientes, perfectos para compartir con api morado o un café bien caliente.

Ingredientes

Para la masa

• 500 g de harina de trigo
• 1 taza de leche tibia
• 2 huevos
• 2 cda de azúcar
• 1 cdta de levadura seca
• 1 cdta de anís en grano
• 1 pizca de sal
• 1 cda de manteca o aceite
• 500 ml de aceite para freír

Para la miel de chancaca

• 250 g de chancaca o panela
• 1 taza de agua
• 1 rama de canela
• 2 clavos de olor
• 1 tira de cáscara de naranja

Utensilios

• Bol grande o batanilla
• Olla pequeña para la miel
• Sartén honda o cazo
• Espumadera
• Cuchara de madera
• Rejilla o fuente con papel absorbente

Preparación

1. Activa la levadura: Disuelve el azúcar en la leche tibia, espolvorea la levadura y espera a que haga espuma y huela a pan recién hecho.
2. Mezcla los secos: En un bol grande, une la harina, la sal y el anís en grano, dejando un hueco al centro para hidratar mejor.
3. Incorpora los huevos: Agrega los huevos batidos, la manteca o aceite y la esponja de levadura. Mezcla con cuchara hasta obtener una masa espesa y ligeramente pegajosa.
4. Bate la masa: Con mano húmeda o cuchara, levanta y deja caer la masa, estirándola para darle aire. Debe tornarse lisa, elástica y con pequeñas burbujas.
5. Deja reposar: Cubre y deja que la masa crezca en un lugar abrigado. Estará lista cuando se note aireada y suave al tacto.
6. Prepara la miel: En una olla, combina el agua con la chancaca, la canela, el clavo y la cáscara. Cocina hasta disolver y espesar ligeramente. Reserva tibia tu miel de chancaca.
7. Calienta el aceite: Coloca suficiente aceite en una sartén honda y llévalo a aceite caliente. Prueba con un trocito de masa para verificar que burbujee y suba sin dorarse de golpe.
8. Da forma: Humedece las manos, toma porciones de masa y estira delicadamente formando un disco con un pequeño centro abierto, típico del buñuelo criollo.
9. Fríe los buñuelos: Desliza la masa en el aceite, deja que se infle y dórala por ambos lados. Retira con espumadera y escurre sobre rejilla para conservar el crocante.
10. Sirve al momento: Acomoda los buñuelos en una fuente y báñalos con miel de chancaca tibia. Disfrútalos enseguida, cuando están esponjosos y fragantes.

Tips para mejorar la receta

• Mantén la masa húmeda y bien aireada. Un buen batido sustituye a un amasado largo y da buñuelos livianos.
• Controla la temperatura del aceite. Si está bajo, se empapan; si está muy alto, se doran por fuera y quedan crudos.
• Humedece tus manos con agua o aceite para dar forma sin que la masa se pegue y para abrir el centro con facilidad.
• Cuela la miel de chancaca antes de servir si quieres un acabado más limpio, sin trocitos de especias.

Cómo servir y acompañar

Sirve los buñuelos recién hechos, tibios y dorados, bañados con un hilo generoso de miel de chancaca. En Bolivia se disfrutan con api morado, café pasado o té de anís. También van bien con leche caliente, ideales para compartir en familia durante una mañana fría.

Preguntas frecuentes

¿Qué harina se usa para los buñuelos bolivianos?

Usa harina de trigo común, la de panadería de toda la vida. No hace falta harina leudante, porque la levadura se encarga del crecimiento. Cernir la harina ayuda a una miga más ligera y evita grumos. Mantén la masa húmeda para un buñuelo suave y aireado.

¿Cómo lograr que queden huecos y borde crujiente?

Trabaja una masa elástica y algo pegajosa, bien aireada por el batido y el reposo. Humedece las manos, estira cada porción y abre un pequeño centro. Fríe en aceite caliente y estable, sin amontonar. Dales vuelta una vez, así se inflan y quedan dorados parejitos.

¿Puedo reemplazar la chancaca para la miel?

Sí, se puede usar miel de caña o panela, disuelta con agua y especias para un jarabe aromático. En apuro, un almíbar con azúcar morena, canela y clavo se acerca al sabor. Ajusta la densidad hasta que cubra bien sin empapar los buñuelos.

¿Se pueden preparar con anticipación?

Lo mejor es freírlos al momento, cuando la masa está viva y el borde cruje. Puedes dejar la masa tapada un rato en frío para organizarte, pero déjala atemperar antes de freír. Si sobran, recaliéntalos en horno suave para devolverles su punto.

Con su anís fragante, masa esponjosa y baño de miel de chancaca, estos buñuelos son puro abrazo boliviano. Anímate a batir la masa, calentar el aceite y freírlos al momento. Verás cómo desaparecen de la mesa, uno tras otro, entre risas y tazas humeantes.

Datos de la receta